La ropa de cáñamo no es una novedad, se tienen registros de hace miles de años, donde se empleó la fibra de cáñamo como materia prima. Pero, nunca gozó de gran popularidad, hasta nuestros días. Para hacerle frente a la moda rápida, la cual tiene un gran impacto ambiental, nace la necesidad de alternativas ecológicas y sostenibles.
¿Qué es la fibra de cáñamo?
La fibra de cáñamo se obtiene de los tallos del cannabis, una vez ya procesados. La capa externa del tallo del cáñamo, posee fibras que pueden trabajarse para obtener cuerdas o hilos similares al algodón.
Para obtener la fibra de cáñamo se deben realizar varios procesos; pasan alrededor de 6 semanas reposando, para que fermente y las bacterias proliferen para poder eliminar la pectina. Este procedimiento es conocido como enriamiento, el cual permite que las fibras se separen para luego proceder a hilarlas en un solo hilo continuo, que facilita el trabajo textil.
Beneficios de usar ropa de cáñamo
Los beneficios de la ropa de cáñamo son amplios, pero vamos a seleccionar los cinco aspectos más resaltantes.
Es una fibra sostenible y renovable
La fibra de cáñamo es la más amistosa con el medio ambiente, ya que para el cultivo de cáñamo se usa poca agua, ningún pesticida, ayuda a renovar el suelo y detener la erosión. Sus hojas al caer nutren el suelo y extrae dióxido de carbono de la atmósfera.
Su cultivo se lleva a cabo en 120 días y requiere menos tierra que el cultivo de algodón. Además, puede producir hasta 2.5 veces más fibras que este último. Al cumplir su ciclo útil, la ropa de cáñamo se puede compostar, esto se debe a que es biodegradable, llegando a descomponerse en un periodo de 4 años, a diferencia del poliéster y otros tejidos sintéticos que pueden tardar cientos de años
Comodidad garantizada
Una ventaja de la ropa de cáñamo, es su carácter atemporal. Siendo muy cómoda tanto en verano como en invierno. La tela transpira bien gracias a su porosidad, lo que permite que el aire circule, manteniéndote fresco en verano o mientras se entrena.
Su poder absorbente y propiedades antibacterianas, previenen los malos olores. Es una tela termogénica, así que, durante los meses fríos, te ayudará a conservar el calor corporal.
La ropa de cáñamo puede amoldarse a tu figura con el uso. Puede ser tan suave como el algodón y suele volverse aún más suave con cada ciclo de lavado, algo que no ocurre con otras prendas de vestir.
Protege tu piel
Filtra la luz ultravioleta naturalmente, evitando que los rayos del sol penetren en tu piel, reduciendo el riesgo de sufrir lesiones. Al ser una prenda que transpira excelentemente, el sudor se evapora. La fibra de cáñamo es hipoalergénica y muy suave para la piel.
Resistente y duradero
La ropa de cáñamo suele ser hasta cuatro veces más resistente que la ropa de algodón, lo que le aporta mayor longevidad. También es muy resistente frente a plagas, las polillas, el moho y a los rayos ultravioleta, por lo que su desgaste ocurre lentamente, llegando a durar años.
Además, gracias a su poder absorbente, retiene mejor el color, reteniendo mejor los pigmentos en comparación a otros tejidos, manteniéndolos por años.
Versatilidad
La versatilidad y propiedades del cáñamo, han hecho posible que hoy en día se pueden encontrar prendas de vestir de alta costura, a base de fibra de cáñamo. Despertando el interés de sectores como el deportivo.
Con los últimos avances tecnológicos, se ha podido ampliar el uso de la fibra de cáñamo, al modificar el grosor de la fibra, lo que determinaría que tan suave o gruesa sería la tela. Permitiendo que pueda ser usada tanto para ropa, mochilas, gorras y demás accesorios.
La fibra de cáñamo puede mezclarse con otras fibras para obtener tejidos más complejos y elaborar ropa más resistente.
El futuro del cáñamo
La ropa de cáñamo tiene un gran futuro por delante, como una alternativa a la moda rápida o fast fashion, que tiene un gran impacto ambiental. La fibra de cáñamo es un tejido versátil y con el tiempo se han perfeccionado los métodos para trabajarla.
Dando como resultado fibras de diferente grosor y calidad, obteniendo así tejidos tan delicados como el lino o la seda, suaves como el algodón o tejidos más gruesos para uso industrial.
Las propiedades de la ropa de cáñamo, la convierten en una prenda ética y responsable con el medio ambiente, además de que es cómoda para la piel, no la irrita, la protege y es muy duradera, cuando termina su ciclo se puede compostar, evitando formar parte de los cientos de plásticos que contaminan el ambiente.
Más allá de una moda del momento, el uso de ropa sostenible marcará un antes y un después en la forma en la que vemos la ropa, donde nos preocupamos por el impacto ambiental que tiene su producción, aumentando cada vez más el interés por alternativas sostenibles.
Esto ha llevado a que los gobiernos flexibilicen las leyes para favorecer y promover el cultivo de cáñamo, por lo que su historia apenas comienza.